Hoy se cumplen 57 días desde la última vez que los niños tuvieron un día “normal” lo pongo entre comillas porque la palabra normal la hemos borrado de nuestro diccionario.
Estos meses han sido muy complicados para todas las personas, cuando tenemos oportunidad de platicar con nuestros compañeros de trabajo y amigos, todos compartimos el mismo sentimiento de ansiedad y desesperación por estar tanto tiempo lejos de nuestras rutinas diarias.
Estamos muy emocionados de compartir esta nueva iniciativa. En muchas ocasiones hemos hablado sobre el impacto positivo que pueden generar los perros a las personas con TEA, en particular a los niños, y es por esto que Autism 4 good en colaboración con los expertos de Sentido Animal organizarán un taller para darle la oportunidad a los niños de interactuar con perros. No será una interacción normal, buscaremos hacer un trabajo personalizado para cada niño basado en las preferencias que tengan, con esto queremos darle una experiencia lo más positiva posible.
En 2013 iniciamos nuestra actividad escolar en España con el programa R.E.A.D., en dos aulas TEA de colegios de Tres Cantos (Madrid). R.E.A.D. es un programa de lectura con perros, cuyo principal objetivo es la mejora de las habilidades lectoras y el incremento de la motivación hacia la lectura en niños y niñas (aunque hemos visto posteriormente sus beneficios también en adultos).
El pasado mes se llevó a cabo en Madrid el primer taller “P.A.W.S” por sus siglas en inglés: Parents, Autism, Workshop and support: Taller y soporte para familias y autismo. Estos talleres están destinados a familias de niños con autismo en los que se aprende a aprovechar las características de sus propios perros para conseguir avances en el desarrollo de los niños.
Me enorgullece compartir con ustedes esta iniciativa de equipo que nace con la intención de cambiar una vida haciendo lo que más nos apasiona; los perros. Cobi es un Golden Retriever precioso, tiene apenas 6 meses y su misión en esta vida es ser un héroe; un perro de asistencia, en cuanto cumpla 15 meses, para un niño con Trastorno del Espectro Autista (TEA).